La pandemia ha alterado la dinámica de funcionamiento de todos los sectores y FAISS no ha quedado ajena a su impacto. Algunas de las iniciativas que estaban en marcha se han visto ralentizadas y el congreso que debió realizarse en 2021 acabamos postponiéndolo para este año. Habrán sido casi 4 años sin haber podido intercambiar experiencias y puntos de vista en un contexto como el que propicia la celebración de un congreso. Tenemos muchas cosas que contarnos y que contar después de todo lo que han supuesto estos más de 2 años involucrados en primera línea para ayudar a superar esta pandemia. Reflexiones mirando hacia atrás y también al futuro, aplicando el aprendizaje de esta época atípica a un porvenir que se adivina lleno de cambios.
El lema de este congreso “aportando valor a la sociedad” condensa algunos de los aspectos clave del análisis que pretendemos abordar. La Inspección de Servicios Sanitarios ha demostrado a lo largo de décadas que es capaz de aportar valor al sistema nacional de salud. La larga lista de actividades en las que estamos implicados y el papel que hemos jugado durante esta pandemia no dejan lugar a dudas sobre la dimensión de esta aportación. Pero la evolución previsible a medio plazo, consecuencia del avance de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC), la genómica o la inteligencia artificial (AI), entre otros, va a requerir un esfuerzo de adaptación para mantener esa aportación de valor. Algunos de los procesos altamente burocratizados que, hasta ahora, requerían la intervención del criterio humano, van a ir siendo automatizados con la mejora no solo de la eficiencia, sino también de la fiabilidad. Un claro ejemplo es el visado de medicamentos, que desde sus inicios ha ocupado una parte importante de los recursos de la Inspección de Servicios Sanitarios y que, con los procedimientos electrónicos gana en agilidad evitando molestias innecesarias a prescriptores y pacientes. Ni el sistema nacional de salud ni la sociedad pueden permitirse renunciar a un uso más eficiente de nuestros escasos recursos.
También queremos subrayar el término sociedad en el lema, porque nos debemos no solo al sistema nacional de salud, sino a la sociedad en su conjunto. Y es que hay aspectos por los que, si bien el sistema de salud ha mostrado un interés limitado, la ciudadanía se ve directamente concernida. El más destable, sin duda, es la evaluación del funcionamiento de los servicios asistenciales y la rendición de cuentas. Una función inherente a la Inspección de Servicios Sanitarios cuyo desarrollo ha sido entre escaso e inexistente, pero que, tarde o temprano, habrá que poner sobre la mesa.
Con estas premisas, abordaremos en este congreso desde los temas más clásicos, como el visado o la incapacidad temporal, hasta los más actuales, como la evaluación o las tecnologías de la información. Esperamos que disfrutéis de la hospitalidad de Valencia y de sus grandes atractivos turísticos.